Ruedas De Plegaria

En centros y templos y monasterios Budistas cómo las Estupas, las ruedas de plegaria u oración giran en el sentido de las manecillas del reloj liberando los mantras y oraciones hacia el cielo.

Una rueda de plegaria es una rueda cilíndrica montada sobre un eje construida de metal, madera, piedra, cuero, o algodón en bruto. Tradicionalmente, en la superficie exterior de la rueda se encuentra escrito el mantra om mani padme hum (en tibetano: ༀམཎིཔདྨེཧཱུྃ།) en sánscrito. También a veces posee dibujos de dakinis, protectores y muy a menudo los ocho símbolos auspiciosos o Ashta mangala. Según la tradición budista tibetana basada en textos de linaje respecto a las ruedas de plegaria, el hacer girar dicha rueda tiene el mismo efecto meritorio que recitar las plegarias.

 

Las ruedas de plegaria son utilizadas para acumular sabiduría y mérito (karma bueno) y para purificar los elementos negativos (karma malo). En el budismo, los Budas y Bodhisattvas han creado una variedad de formas (upaya) para ayudar a que los practicantes se aproximen aún más a la iluminación. La idea de mantras rotativos se relaciona con numerosas prácticas del Tantra en las cuales el practicante visualiza mantras que giran alrededor de los nadis (‘ríos’, canales de energía) y especialmente alrededor del chakra meridional, tal como el corazón y la corona. Por lo tanto las ruedas de plegaria son una ayuda visual para desarrollar la capacidad propia para este tipo de visualizaciones tántricas.

El método para aquellos que oran con una rueda de plegaria es muy específico (con pequeñas variaciones de acuerdo a las diferentes sectas budistas). El practicante hace girar por lo general la rueda en sentido horario, en la dirección en la que los mantras están escritos, que es la dirección del sol cruzando el cielo. En raras ocasiones, practicantes tántricos avanzados como Senge Dongma, la dakini cara de león gira la rueda contra reloj para manifestar una energía de protección más colérica. A medida que el practicante gira la rueda, lo mejor es focalizar la mente y repetir el mantra «Om mani padme hum». No solo esto incrementa el mérito ganado por el uso de la rueda sino también es una técnica de estabilización de la mente, que enseña a la mente mientras el cuerpo está en movimiento.

Al entonar el mantra mani de manera consciente, la motivación del Bodhicitta (la mente noble que aspira a una iluminación para el beneficio de todos los seres) mejora drásticamente los efectos de la rueda de plegaria. Es de destacar que se indica que incluso girando la rueda distraídamente también trae beneficios y méritos y se afirma que en el texto de la rueda que incluso un insecto que cruza la sombra de la rueda se verá beneficiado. Un giro tiene un mérito equivalente al de leer la inscripción en voz alta, cuantas más veces esté escrito el mantra «Om mani padme hum» en la rueda, más poderosa es la rueda de plegaria (ya que el mantra será repetido más veces). Es mejor girar la rueda a un ritmo suave, no demasiado rápido o frenéticamente. Mientras se gira suavemente tener en cuenta la motivación y el espíritu del bodhicitta. Los beneficios atribuidos a la práctica de girar la rueda son vastos. No solo sabiduría, compasión y el despertar de bodhicitta en el practicante, sino también el desarrollo de los siddhis (poderes mentales como clarividencia, precognición, leer los pensamientos de otro, etc.). El practicante puede repetir el mantra cuantas veces sea posible mientras gira la rueda, estabilizando la mente calmada y meditativa. Al final de la sesión de práctica en la tradición budista tibetana se dedican todos los méritos acumulados al beneficio de los seres sintientes. Luego se repite «om ah hum» tres veces. Esto es consuetudinario con el final de cualquier práctica budista tibetana, incluida la rueda de plegaria.

Thubten Zopa Rimpoche comenta que instalar una rueda de plegarias tiene la capacidad de transformar un lugar “...apacible, agradable y conducente a la mente”. Se dice que el simple hecho de tocar una rueda de plegaria trae gran purificación al karma negativo.